La historia de los cascos para esquà de travesÃa cambió en 2017, cuando la ISMF (Federación Internacional de Esquà de Montaña) obligó a portarlos a todas y todos los competidores en pruebas bajo su auspicio, y además anunció que éstos deberÃan cumplir una doble homologación, para esquà y para alpinismo/escalada.
Inmediatamente, las marcas debieron reaccionar diseñando cascos acordes a esta norma ISMF. Lo cual, como veremos, provocó a su vez que la mayorÃa de practicantes de skimo, hoy en dÃa, hayan tomado la saludable decisión de portar casco en sus salidas.
El esquà de montaña es un deporte aeróbico. Hasta la creación de este tipo de cascos, poca gente usaba este elemento de seguridad, porque un casco de esquà alpino no es operativo para esta actividad rápida (era popular el dicho "llevar un casco de alpino para esquà de travesÃa serÃa como llevar un casco de moto para ir en bicicleta"), y un casco de escalada, como veremos, no protege en caÃda en descenso.
Pero, ¿por qué esta doble homologación?
La doble homologación de los cascos de esquà de travesÃa
- Un casco de escalada está diseñado para proteger de impactos superiores que podrÃan fracturarnos huesos (caÃda de piedra, hielo, material, etc), pero no para amortiguar impactos en caÃda a velocidad de esquÃ, que supondrÃan un movimiento del cerebro que le provocarÃa daños. Su protección frontal, lateral y trasera es limitada.
- Un casco de esquà alpino está diseñado para amortiguar en golpe contra suelo, etc, provocado por caÃda, evitando que el cerebro se mueva y reciba daños internos, con golpe normalmente frontal, lateral y trasero, y para evitar penetración frontal, lateral y trasera, pero no tanto para proteger de impactos superiores, como caÃda de piedras, etc.
La ISMF consideró que, puesto que el esquà de montaña es un deporte que une el alpinismo con el esquÃ, un casco adecuado para esta actividad debÃa:
- Proteger de impacto superior, como uno de alpinismo
- Y a su vez amortiguar un golpe en movimiento, frontal, lateral o trasero, como uno de esquÃ.
Es decir: debÃa cumplir ambas homologaciones:
- EN 12492, para cascos de escalada y alpinismo
- EN 1077, para cascos de esquà tipo B (no integral, orejas que pueden descubrirse)
De esta manera, estamos protegidos tanto en caso de caÃda de piedras o hielo durante el ascenso, como de impactos por golpe o penetración en caÃda durante el descenso.
Evidentemente, esto es más fácil de decir que de hacer. Principalmente porque la seguridad es solo una parte de la ecuación: para un deporte aeróbico, la ligereza y, sobre todo, la ventilación, son fundamentales.
Ventilación y diseño de los cascos de esquà de travesÃa
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Hubo varios problemas que resolver. Si pensamos que unos están diseñados para prevenir daños ante caÃda de elementos y los otros para amortiguar golpes en caÃda, es fácil de imaginar que:
- Los cascos de esquà alpino suelen tener ventilaciones en la parte superior
- Los cascos de escalada suelen tener ventilaciones en los laterales
- Un casco para esquà de travesÃa no puede tener la capacidad calorÃfica de uno de alpino
- Y necesita la ligereza de uno de escalada
- Pesan algo más y dan más calor que los modelos especÃficos de escalada
- Al ser más ligeros que los de esquà alpino, suelen ser menos duraderos que estos
- Emplear frenos en la fijación. Es la más adecuada, pero aumenta el peso, no es infalible en terreno muy escarpado, en el que perder una tabla no es una opción, y por ello hay quien prefiere...
- Emplear correas de sujeción, que se enganchan de la fijación a la bota.
- Los cascos de esquà de montaña llevan incorporado un sistema de sujeción para linterna frontal y para máscaras de esquÃ.
- Normalmente las orejas pueden cubrirse, con un sistema de quita y pon, pero excepto en dÃas de mucho frÃo, suelen llevarse descubiertas.
- Como ocurre con los cascos de escalada, los más ultraligeros, para competición, pueden ser menos duraderos, más sensibles a traslados, porteo dentro de mochila, etc.
- Excepto en competición, en donde no está permitido, puede haber quien decida emplear su casco de esquà alpino, si principalmente se dedica al freeride, o de escalada, si principalmente asciende, para sus actividades de esquà de montaña. Es una elección personal, pero debe saber, como hemos explicado en este artÃculo, que la protección no será completa.
- Algún modelo, como el Movement 3Tech Alpi W, Movement 3Tech Alpi, triplica la homologación: esquà alpino, escalada, ciclismo.
Movement 3Tech Alpi W, casco triple homologación: esquÃ, escalada, ciclismo
Como puede verse, la solución general ha sido sustituir las aberturas laterales y traseras por rejillas de material que no afectan a la resistencia, permitiendo cumplir la homologación del casco de esquÃ, y eliminar o desplazar las directamente situadas en la zona superior del casco, para cumplir con la homologación de un casco de escalada.
Por otro lado, para conseguir la homologación europea de los cascos de esquà alpino, los laterales y zona de nuca tienen que estar protegidos, cosa que no suele ocurrir con los cascos de escalada. El casco es más bajo en esas zonas.
Además:
Con todos estos parámetros, y a pesar de la dificultad de combinarlos, se crearon los cascos de skimo. Y los resultados son excelentes: cascos ligeros, ventilados, que nos protegen en todas las situaciones.
Por eso su uso se está extendiendo de forma masiva: por fin existen cascos que, además de aportarnos la seguridad necesaria, tienen un diseño acorde al deporte aeróbico que es el esquà de travesÃa. Cascos que pueden llevarse en la cabeza durante toda la jornada.
¿Entonces, un casco de esquà de montaña homologado me sirve también como casco de escalada, alpinismo y esquà alpino?
Efectivamente, cumple estas 3 funciones.Sin embargo, como todo término medio, tiene sus hándicaps:
Nota importante sobre seguridad
En realidad, hoy en dÃa hay pocos motivos para no llevar en todo momento casco durante la práctica del esquà de travesÃa. Pero, si alguien decide no llevarlo, debe tener en cuenta una situación en la que es imprescindible su uso: uso de correas de seguridad en lugar de frenos.Para evitar perder las tablas de esquà en caso de que se suelten durante una caÃda, tenemos dos opciones:
En el caso de elegir las correas, y como puede intuirse viendo la foto, si en una caÃda aparatosa las tablas se sueltan, se quedarán colgando de nuestras botas, con gran posibilidad de que en sus giros y movimientos impacten contra nuestra cabeza de forma violenta.
Con correas, el uso de casco es prácticamente obligatorio.
Otras cosas
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