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Angela Eiter libera Madame Ching, 9b. 1ª escalada más dura realizada por una mujer

La tirolesa Angela Eiter ha realizado la 1ª escalada de Madame Ching, cerca de su casa. Es la más dura 1ª escalada a una vía por una mujer.

Angela Eiter, en Madame Ching. Foto: Raphael Pöham / Red Bull Content Pool
Angela Eiter, en Madame Ching. Foto: Raphael Pöham / Red Bull Content Pool

La austriaca Angela Eiter ha conseguido la primera escalada de una vía a la que ha bautizado como Madame Ching, proponiendo un grado de 9b. “Es similar a La Planta de Shiva, el 9b de Villanueva del Rosario que escalé en 2017”, afirma la tirolesa.

De esta forma, de confirmarse el grado, esta liberación se convierte en la más dura 1ª escalada de una vía realizada por una mujer. Cuando Angela encadenó La Planta de Shiva, ya se convirtió también en la primera mujer en escalar un 9b.

Madame Ching

La vía está situada cerca de su casa, y fue trazada y equipada por Bernie Ruech, el marido de Angela, en la primavera de 2018. Bernie empezó a probarla antes de cedérsela a ella (“ha sido su regalo”). Atraviesa de derecha a izquierda el extraplomo “de una forma muy similar a la Planta de Shiva”, y Angela ha tenido que resolver todos los pasos y limpiar la vía, de roca no muy sólida.

Angela Eiter, en Madame Ching. Foto: Raphael Pöham / Red Bull Content Pool
Angela Eiter, en Madame Ching. Foto: Raphael Pöham / Red Bull Content Pool

Aunque en un primer momento pensó que, debido a su físico (Angela mide 1’55m) no podría escalarla, la llegada del confinamiento hizo que, cuando el clima tirolés lo permitió, comenzara a trabajar en ella con fuerza, hasta que consiguió, a base de mucho esfuerzo, resolver los casi 100 pasos y 50m de longitud de Madame Ching. Eiter considera que alguien con brazos y piernas más largos puede emplear menos movimientos para encadenar. En realidad, esto es algo que suele ocurrirle: cuando escaló La Planta de Shiva tuvo que buscar su propia forma de hacerlo, ya que las dos personas que la habían escalado hasta ese momento eran hombres mucho más altos que ella.

Esfuerzo físico y mental: en una primera escalada a este nivel, al no haber antecedentes, nunca se está seguro si realmente es posible encadenar, o quizás algún paso se queda por encima del grado conocido hasta el momento.

El día del ascenso la cosa no pintaba bien, por las condiciones meteorológicas: “Cuando llegué, todo estaba completamente mojado. Por suerte, decidí esperar, y una después, secando mientras tanto presas con un pañuelo, un fuerte viento se levantó, porque se acercaba una tormenta. Sabía que tenía que aprovechar el paréntesis antes de que se pusiera a llover con fuerza. Faltando 5 movimientos para encadenar, empecé a notar la lluvia en mi piel, pero por suerte esta última parte es fácil”.

Sobre el grado, afirma que “es algo que me están preguntando constantemente. Amo el desafío de escalar una vía en mi límite, pero cada vez me gusta menos hablar de la dificultad. Ya me he equivocado varias veces. Pero compartiré mi estimación personal: por el estilo de resistencia y potencia, que se adapta bien a mí, creo que es similar a La Planta de Shiva”.

¿Por qué el nombre de Madame Ching? “Fue una pirata china que luchó contra muchas potentes naciones, como yo lucho con potentes vías. No soy la mujer más fuerte y soy pequeña, pero me siento feliz de poder mostrar a otras mujer que también pueden hacerlo”.

Información y fotos cortesía de Red Bull

Angela Eiter, en Madame Ching. Foto: Raphael Pöham / Red Bull Content Pool
Angela Eiter, en Madame Ching. Foto: Raphael Pöham / Red Bull Content Pool

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